Hoy os vengo a hablar del barco más grande de la antigüedad, el cual es considerado como el primer transatlántico. ¡Comencemos!
El Siracusia fue el barco más grande construido en la Antigüedad, y no se construyó uno de iguales dimensiones hasta el siglo XIX. El diseño fue obra de Arquímedes, y para su construcción el tirano Hierón II de Siracusa (306-215 a.C.) acudió a Arquías de Corinto. Tenía 55 metros de eslora, aunque algunas fuentes hablan de 110 metros, y 14 metros de manga. Este tamaño colosal requirió el trabajo de 300 artesanos y un año completo de trabajo.
Su capacidad de carga era asombrosa: entre 1.600 y 1.800 toneladas. Podía albergar hasta 1.940 pasajeros, entre tripulación y soldados, y unos 20 caballos con sus establos. Incluso tenía 142 camarotes para pasajeros de primera clase, lo que podría considerarse como "el primer transatlántico de la antigüedad".
El Siracusia disponía de gimnasio, biblioteca, sala de dibujo, termas, sala de lectura en forma de reloj de sol, comedor, y un templo dedicado a Afrodita Pontia cuyo suelo era de ágata. Además, contaba con varios jardines. Su lujo llegó a tales cotas que su decoración incluía maderas nobles, gemas preciosas, mosaicos con la historia de la Ilíada, estatuas, pinturas y artesonados.
¿Lo conociaís? ¿Os habría gustado viajar en él? ¡Os leo en los comentarios!