¿Pero, por qué el 8 de marzo?
La fecha tiene sus raíces en movimientos históricos de mujeres trabajadoras y sus luchas por mejores condiciones laborales y derechos en el siglo XIX y principios del siglo XX.
Uno de los eventos clave que condujo a la elección del 8 de marzo fue la huelga de mujeres textiles en Nueva York en 1908, cuando un grupo de mujeres trabajadoras protestó por las condiciones laborales precarias y exigieron mejores salarios, jornadas laborales más cortas y derechos sindicales. A lo largo de los años, este tipo de movimientos y luchas se multiplicaron en varios países y abordaron diversas cuestiones, como el derecho al voto, la igualdad salarial, la igualdad de oportunidades y la lucha contra la discriminación de género.
El Día Internacional de la Mujer se formalizó después de la Segunda Conferencia Internacional de Mujeres Socialistas en Copenhague en 1910, donde se propuso establecer un día para promover los derechos de las mujeres y la igualdad de género. La fecha varió en diferentes países hasta que en 1975 las Naciones Unidas oficialmente declararon el 8 de marzo como el Día Internacional de la Mujer.
Esta fecha se utiliza todavía para resaltar los avances logrados en materia de derechos de las mujeres y para recordar que todavía hay desafíos pendientes en la lucha por la igualdad de género en todo el mundo. Se llevan a cabo diversas actividades, eventos y campañas para concienciar sobre la importancia de garantizar los derechos de las mujeres y promover un mundo más justo e igualitario para todas las personas, independientemente de su género.
