Hoy os vengo a hablar de la locomotora que veis en el dibujo de la derecha. Dicha locomotora pertenecía a la compañía Candem & Amboy. En el año 1848 el presidente de dicha compañía, Robert L. Stevens viajo a Inglaterra y allí observo una serie de locomotoras que tenían una configuración 6-2-0 por lo que al regresar a Estados Unidos mando a su maestro mecánico Isaac Dripps la construcción de una locomotora que tuviera esa configuración de ruedas.
Dicha locomotora debía consumir carbón algo poco usual en la época ya que la mayoría consumían madera algo más económico y fácil de conseguir que el carbón, pero Isaac aceptó el desafió.
La primera de las tres locomotoras basadas en esa especificación, denominadas John Stevens, fue completada en 1849. Dripps no estaba muy seguro de que la locomotora resultase efectiva en los ferrocarriles estadounidenses, y sus dudas resultaron ser correctas. La fuerza de tracción de la locomotora resultó no ser suficiente para tareas prologadas o pesadas. Con solo un eje motor y tres ejes portantes, la mayor parte del peso de la locomotora está distribuido sobre estos últimos. Pasó al menos un siglo antes de que se usaran nuevamente 6 ejes delanteros portantes, en las PRR S1 y S2.
La administración del C&A, por su parte, pensaba que la locomotora tenía buenas prestaciones, y se solicitaron dos unidades más, que fueron empleadas en el servicio de pasajeros. Se alegó que podían alcanzar casi 100 km/h en una época en que los trenes de mayor velocidad alcanzaban tan solo 65 km/h. Las 6-2-0 más adelante fueron reconstruidas como 4-4-0 y permanecieron en servicio hasta 1865.